Passionné(e) de lecture ? Inscrivez-vous gratuitement ou connectez-vous pour rejoindre la communauté et bénéficier de toutes les fonctionnalités du site !  

La Copa Dorada

Couverture du livre « La Copa Dorada » de James Henry aux éditions Culturea
  • Date de parution :
  • Editeur : Culturea
  • EAN : 9791041934218
  • Série : (-)
  • Support : Papier
Résumé:

Cuando pensaba en ello, el Principe se daba cuenta de que Londres siempre le habia gustado. El Principe era uno de esos romanos modernos que encuentran junto a las orillas del Tamesis una imagen mas convincente de la fidelidad del antiguo estado que la que habian dejado junto a las orillas del... Voir plus

Cuando pensaba en ello, el Principe se daba cuenta de que Londres siempre le habia gustado. El Principe era uno de esos romanos modernos que encuentran junto a las orillas del Tamesis una imagen mas convincente de la fidelidad del antiguo estado que la que habian dejado junto a las orillas del Tiber. Formado en la leyenda de aquella ciudad a la que el mundo entero rendia tributo, veia en el actual Londres, mucho mas que en la contemporanea Roma, la verdadera dimensión del concepto de Estado. Se decia el Principe que, si se trataba de una cuestión de Imperium, y si uno queria, como romano, recobrar un poco ese sentido, el lugar al que debia ir era al Puente de Londres y, mejor aún, si era en una hermosa tarde de mayo, al Hyde Park Corner. Sin embargo, a ninguno de estos dos lugares, al parecer centros de su predilección, habia guiado sus pasos en el momento en que le encontramos, sino que habia ido a parar, lisa y llanamente, a Bond Street, en donde su imaginación, propicia ahora a ejercicios de alcance relativamente corto, le inducia a detenerse de vez en cuando ante los escaparates en los que se exhibian objetos pesados y macizos, en oro y plata, en formas aptas para llevar piedras preciosas en cuero, hierro, bronce, destinados a cien usos y abusos, tan apretados como si fueran, en su imperial insolencia, el botin de victorias alcanzadas en lejanos pagos. Sin embargo, los movimientos del joven Principe en manera alguna revelaban atención, ni siquiera cuando se detenia al vislumbrar algunos rostros que pasaban por la calle junto a él bajo la sombra de grandes sombreros con cintajos, u otros todavia mas delicadamente matizados por las tensas sombrillas de seda, sostenidas de manera que quedaban con una intencionada inclinación, casi perversa, en los coches del tipo victoria que esperaban junto a la acera.

Donner votre avis